La sinagoga de Aulnay-sous-Bois ya estaba construida cuando se creó, en mayo de 1928, la comisión rabínica encargada de definir las necesidades de lugares de culto en los suburbios de París.
Al igual que la sinagoga de Livry-Gargan, una sociedad de ayuda mutua, L'Avenir, se encargó de la construcción del edificio. El terreno se compró a un correligionario en julio de 1927 y el permiso de construcción se concedió el 8 de septiembre siguiente. La primera piedra de la sinagoga de Aulnay-sous-Bois se colocó el 12 de agosto de 1928. Con motivo de esta ceremonia, que fue más un asunto familiar que oficial, se hicieron muchas donaciones para la construcción del edificio. En la lista de donantes aparecen nada menos que setenta y dos nombres, casi todos de origen ruso-polaco. No se conoce la fecha exacta de la inauguración de la sinagoga, pero la tradición oral cuenta que, ese día, el suelo no estaba completamente terminado, por lo que se rezaba sobre la tierra.
Al igual que el de Livry-Gargan, el edificio es modesto y sólo mide 12,50 metros de largo y 6,50 de ancho. El terreno concedido es estrecho y la sinagoga conserva su orientación noreste (mientras que la tradición dicta una orientación este, hacia Jerusalén). A la sala de oración se accede directamente, sin porche ni vestíbulo. Una tribuna, cuya banda está subrayada por un friso decorado con una imponente moldura floral, recorre toda la anchura de la sala de oración. La planta baja ofrece unos sesenta asientos para hombres, mientras que unas treinta mujeres pueden sentarse en el andén.
La bimá (el pupitre de lectura) está en el centro y el gabinete sagrado, el aron kodesh, está frente a la entrada. Los asientos, de madera forjada y terciopelo, son de factura antigua y parecen proceder de una sala de oración anterior. La luz entra a través de los óculos a dos aguas y las vasistas cenitales. La altura del techo de la sala de oración es baja, por lo que se utilizaron trucos arquitectónicos. El techo sigue la pendiente del tejado a ambos lados y en el centro, formando un arco circular. El armazón está formado por vigas en voladizo opuestas conectadas por tirantes de acero de pequeño diámetro. El resultado es un espacio sorprendentemente grande, que no guarda relación con el tamaño real del edificio.
Dos pilastras flanquean las esquinas de la fachada. Una puerta doble se sitúa en un arco, cuyo semicírculo superior está cerrado por una ventana con parteluces radiados en arco de círculo. Las tablas de la Ley están colocadas sobre la puerta, coronadas a su vez, bajo el ángulo del frontón, por un óculo que muestra la estrella de seis puntas. La sinagoga de Aulnay-sous-Bois, situada en la avenida de Clermont-Tonnerre, una pequeña callejuela de la zona suburbana, se integra en el entorno. La fachada pintada y sin adornos les parece a algunos fieles poco llamativa, mientras que otros piensan que es una hermosa representación del beit-ha-knesset, la "casa para la congregación" de los fieles. Aunque modesta, la simbología judía está bien representada en la fachada y las pilastras son un discreto recuerdo de las columnas del Templo de Jerusalén: Yakin y Boaz.
